Caleta Olivia, Santa Cruz

Introducida por grandes acantilados y hermosas playas, la ciudad de Caleta Olivia aparece en el noreste del territorio de Santa Cruz, sobre la costa del Golfo San Jorge, dentro del Departamento Deseado. Es la segunda ciudad de importancia por su movimiento comercial y petrolífero, y constituye por su ubicación, la puerta de ingreso a la provincia.

Caleta Olivia es una ciudad patagónica privilegiada por el clima, ya que en ella las temperaturas mínimas registradas en invierno rara vez descienden de los 4º C, y en verano, sus playas reciben satisfechas el calorcito de hasta 25º C.

Caleta Olivia, Santa Cruz

Esta región, asomada en el rincón noreste de Santa Cruz, se conforma casi exclusivamente por una meseta que llega hasta el mar penetrando en el océano, exhibiendo en las costas espléndidas playas de pedregullo, y en el centro una sucesión de acantilados que se tornan esqueléticos allí donde la exposición los deja a merced del viento.

Una Reserva Natural Municipal, encargada de proteger la avifauna autóctona, los lobos marinos de un pelo y sus hábitats correspondientes; playas tranquilas donde descubrir las sensaciones del verdadero relax; áreas deportivas indicadas para realizar actividades al aire libre; y un museo tan variado como la vida misma, conforman la base más significante de la propuesta de Caleta Olivia, a la cual se anexa un bosque petrificado, testimonio vivo del paso del tiempo en la Patagonia Argentina.


Bosque Petrificado en Caleta Olivia

Propio de la región patagónica, la provincia de Santa Cruz encuentra en su interior un portal hacia el pasado más remoto de la vida sobre la tierra. Fantástico, cautivante y misterioso, un bosque de coníferas mutadas en piedra seduce desde su lugar en cercanías a Jaramillo despertando el interés de la paleontología y de los apasionados por el ayer y sus seres.

El Bosque Petrificado yace silencioso al noreste de la provincia de Santa Cruz, en el Departamento Puerto Deseado, siendo Jaramillo la población más cercana. Abarca en la actualidad unas 13.700 hectáreas y constituye un atractivo turístico por excelencia. Es que si de retroceder en el tiempo se trata, nada más apasionante que llegarse hasta el bosque de araucarias petrificadas, una prueba irrefutable del pasado cálido, húmedo y frondoso de la Patagonia, ante el presente árido y frío.

Caleta Olivia, Santa Cruz

Declarado Monumento Natural, este espacio patagónico preserva dentro de sus límites ejemplares arbóreos sometidos a antiquísimos procesos de petrificación, así como también otros tipos de fósiles que han aportado a su conversión en eje de atracción antropológica, geológica y paleontológica. Restos de vértebras y huesos de posibles animales prehistóricos que aún no han sido analizados e identificados, suman misterio e intriga a este apasionante atractivo patagónico, de visita inomitible.

Un sendero peatonal recorre 2.mil metros a lo largo de los cuales la vista puede deslumbrarse con gigantes araucarias de hasta 70 metros de alto, pero caídas hace cientos de millones de años, y petrificadas por acción de agentes naturales cuando ya contaban con mil años de edad.