El Hoyo, Chubut
Capital Nacional de la Fruta Fina, la localidad de El Hoyo surge en el extremo noroeste de la provincia de Chubut, conformando junto a poblados vecinos, más uno rionegrino, la Comarca Andina del Paralelo 42. Productiva y pintoresca, enclavada en la cordillera, invita a deleitarse con su propuesta turística y su esencia serena.
El Hoyo comprende un territorio privilegiado por la riqueza de su suelo y la bondad del clima en su extensión, todo lo cual lo posiciona como uno de los centros de producción frutícola más importantes, y cada año lo viste de escenario para el desarrollo de la Fiesta Nacional de la Fruta Fina.
Esta localidad patagónica ostenta una planta urbana acondicionada con servicios de excelencia, y una zona de distinguidas
chacras productivas que, además de dominar la principal actividad económica de la localidad y la región, se ponen a disposición del
turismo permitiendo el acceso a sus propiedades y dejando al descubierto sus labores y costumbres.
Pasear por sus fascinantes paisajes; visitar las
cascadas y
lagunas; buscar el pique en el
Río Epuyén y
Puerto Patriada; dejarse llevar por la adrenalina en la práctica de
trekking, rafting, escalada; experimentar la libertad en vuelos de
parapente; conocer la zona en encantadoras
cabalgatas; son algunas de las opciones componentes de la propuesta turística de
El Hoyo, un lugar para disfrutar los 365 días del año.
Comarca Andina en El Hoyo
Ocupando el noroeste de la Provincia de Chubut y el sudoeste del la Provincia de Río Negro, la Comarca Andina del Paralelo 42 es una de las propuestas apasionantes que la Patagonia Argentina tiene preparada para quienes deseen inmiscuirse entre sus majestuosos paisajes. Con las imponentes montañas cordilleranas de fondo, todos los itinerarios invitan a contactarse plenamente con la naturaleza autóctona que ostenta esta región.
Conformada por las localidades de El Bolsón, El Hoyo, El Maitén, Lago Puelo, Epuyen y Cholila, los paisajes de esta porción sureña aparecen salpicados por cristalinos ríos que bajan desde las alturas; lagos de un azul intenso; bosques enmarañados; cumbres siempre nevadas; y un sinfín de sorpresas más, que imponen las actividades al aire libre como la mejor manera de descubrir la desmesurada belleza que domina estas latitudes.
Dentro de la comarca también se encuentran el Parque Nacional Lago Puelo y la porción norte del Parque Nacional Los Alerces, dos oportunidades para emprender excursiones terrestres o lacustres y admirar la atrapante combinación de la flora y la fauna autóctona.
Partiendo desde
El Bolsón las sorpresas no se hacen esperar: el
Cerro Piltriquitrón, el
Bosque Tallado, y el
Valle del Río Azul son los lugares indicados para quienes ansíen encontrarse cara a cara con las postales andinas. El
Trekking, las
Caminatas, y las
Travesías en 4X4 son algunas de las alternativas para mimetizarse con este paraíso terrenal.
Continuando,
El Hoyo recibe a sus visitantes con los colores y los aromas de las
Frutas Finas: cerezas, fresas, y frutillas se esparcen por las chacras invitando a descubrir los secretos de su cultivo. Además, esta comunidad invita a deleitarse con
jornadas de pesca en el Río Epuyen y en el Puerto Patriada; vertiginosos
vuelos en parapente; y apacibles
cabalgatas que permiten encontrarse con rincones fascinantes. A pocos kilómetros,
Villa Lago Puelo se suma con sus propuestas de
turismo rural y de
aventura, y por supuesto los encantos del
Parque Nacional homónimo.
Y hay más:
El Maitén también tiene lo suyo para ofrecer. Conocido a nivel mundial por ser capital del tren de trocha angosta “Viejo Expreso Patagónico” (conocido popularmente como
“La Trochita”) invita a emprender un viaje en el tiempo que cuenta la historia de esta reliquia ferroviaria, y también despliega una completa cartelera para entrar en contacto con el ambiente natural que la rodea.
Hacia el sur de la
Comarca Andina del Paralelo 42, la localidad de
Epuyen propone recrearse con la práctica de
Deportes náuticos en su Lago; visitar el antiguo Molino Harinero; y sorprenderse con los testimonios de las culturas indígenas en el
Circuito de la Rinconada. Y ya más austral, Cholila aporta un paisaje diferente dónde comienzan a perderse las ondulaciones cordilleranas para regalar una planicie en la que reina una serenidad envidiable. Desde aquí, el
Parque Nacional Los Alerces espera a pocos kilómetros para seguir brindando más naturaleza en estado puro. A estos destinos se suman varios
parajes que atrapan a los viajeros con su tranquilidad; sus tradiciones; la amabilidad de su gente; y la hermosura de su entorno.
