Plaza Huincul, Neuquén

A 104 kilómetros al oeste de Neuquén Capital, Plaza Huincul se destaca junto a la cercana Cutral–Co como uno de los destinos ideales para disfrutar del turismo paleontológico. Emplazada dentro de les Estepa de los Dinosaurios promete paseos y visitas emocionantes para disfrutar en familia.

Excavaciones a cielo abierto, exposiciones y parques son los diferentes ámbitos en los que se pueden apreciar los restos fósiles de los gigantes que habitaron estas tierras. Imperdible resultará el Museo Carmen Funes, que justifica la denominación de la región: “valle de los dinosaurios”.

Plaza Huincul, Neuquén

Pero aquí no terminan las propuestas de esta localidad neuquina: el pozo termal “La Curva” invita a relajarse y aprovechar las propiedades terapéuticas de estas aguas. Con características alcalino-salobres son recomendadas para quienes sufren afecciones dérmicas o reumáticas, ofreciendo piletas al aire libre que hacen más placenteros los baños.

Ciudad que tuvo su origen con el descubrimiento de un yacimiento de petróleo y gas, aún se puede admirar el primer pozo realizado en 1918 para obtener el preciado líquido. En este lugar se puede observar la antigua refinería perteneciente a YPF.

La colonial Capilla Santa Teresita y el Monolito en homenaje a la primera habitante de Plaza Huincul se suman agregando atractivos a este rinconcito patagónico.


Turismo Paleontológico en Plaza Huincul

“Loma de descanso” o “loma chata”, como la denominaron los mapuches, esta región del centro-este de la Provincia de Neuquén además de brindar postales con una belleza paisajística impactante es uno de los destinos ideales para el atrapante turismo paleontológico.

Plaza Huincul y su vecina Cutral –Co permiten recorrer las excavaciones en las que se descubren estos emocionantes testimonios milenarios; de la mano de guías expertos en el tema los paseos combinan la admiración de impresionantes restos fósiles con el conocimiento obtenido de ellos.

Plaza Huincul, Neuquén

Con más de un siglo dedicado a la paleontología, estas tierras albergaron a los dinosaurios más antiguos del mundo. Se trata del Argentinosaurus Huinculensis y el Giganotosaurus Carolini; se cuenta con parte del esqueleto del primero y se estima que media unos 35 metros de largo.

El Museo Carmen Funes es el lugar indicado para admirar a estos antiguos gigantes. Fue fundado en 1984 y alberga a vertebrados continentales, restos de invertebrados marinos, plantas fósiles, junto un área de arqueología y otra de antropología.